Llega fin de año y es probable que tengas alguno que otro gasto que escape de tus finanzas actuales, entonces viene a tu cabeza la idea: “¿Y si saco un préstamo?.
Un crédito personal no es mala idea cuando necesitas dinero, pero tienes que ser consciente del costo de los intereses que tendrás y de tus posibilidades de pago. Con una planificación y usando el préstamo en algo necesario o provechoso puedes sacarle la mayor ventaja.
En esta nota te dejo alguna información que deberás tener en cuenta si piensas pedirle dinero a un banco.
#1. Ten tu historial crediticio en verde
Antes de que se te ocurra pedir un préstamo o crédito procura tener tu historial crediticio limpio. Puedes conocer gratis tu historial crediticio en la página de Sentinel, en la web de la SBS o a través del autoevaluador de Solven.
#2. Ten actividad financiera
Si no tienes actividad financiera será más difícil que te den un préstamo. Si pasaste el punto uno no hay problema con esto. si no es el caso lo más probable es que el banco evalúe tu capacidad de pago, para lo que no solo bastará el monto fijo que ganes cada mes, sino proporcionar un sustento de pago.
#3. No dejes que te elijan: elige tú
Que no sea el banco el que te llame para decirte que aprobaste para un préstamo, elige tú al mejor postor. ¿Cómo es eso? ¡Pues el que te ofrezca el menor TCEA! ¿No querrás pagar más intereses y comisiones a un banco si otro te ofrece menos, verdad?
Un consejo adicional que te dejo, es que siempre que saques un crédito no te vayas por el banco que te ofrece el mayor tiempo de pago. Recuerda a más meses más intereses pagarás. Paga tu deuda en el menor tiempo que te sea posible.
Comparar las ofertas de los bancos también es prudente para reducir el pago de intereses. Puedes encontrar la mejor opción para ti en Solven: el crédito a tu medida en pocos pasos.